Desde Amigos de los Mayores afrontamos el verano como una época en la que tenemos que concentrar de forma especial nuestros esfuerzos, la soledad de las personas mayores se incrementa durante estas fechas, debido a las altas temperaturas que les impiden salir de casa y al debilitamiento de las redes sociales de las que disfrutan las personas mayores a causa de las salidas debido a las vacaciones.
Por eso cada año reforzamos nuestro programa de acompañamientos puntuales y las actividades que ofrecemos para que las personas mayores puedan salir de casa y olvidar su soledad en la medida de lo posible. Este año a nuestras tradicionales vacaciones adaptadas de un fin de semana hemos añadido una escapada de un día a la Sierra de Madrid.
Los pasados 18 y 19 de julio varias personas mayores y voluntarias de la Fundación disfrutaron de una Casa Rural en Horcajo de la Sierra, un bonito pueblo de la Sierra de Madrid. Todos disfrutaron de una mañana fantástica, en la que compartieron un rato de compañía, probar un menú veraniego a base de paella y gazpacho e incluso algunos se atrevieron a poner los pies en remojo en la piscina del establecimiento.
Para acabar un buen helado que casi hizo olvidar las altas temperaturas de este julio madrileño.
Ambos días la jornada se prolongó hasta las 19:30 y no solo los mayores sino también los voluntarios tuvieron oportunidad de conocerse mejor unos a otros y compartir un rato de risa y charla. Queremos agradecer a los voluntarios que se implicaron en el desarrollo y organización de una actividad que dado su buen resultado y acogida seguramente repetiremos más años. Ya afrontamos la espera de nuestro segundo turno de vacaciones a principio de septiembre, y por supuesto no cesamos en nuestros acompañamientos a domicilio. El verano no tiene por qué ser un sinónimo de calor y soledad para las personas mayores.
