“Tengo una vida completa, soy afortunada y tengo mucho más de lo que se puede pedir. Crecí en un mundo en el que el anciano jugó siempre un papel importante en la vida cotidiana. Antiguamente los mayores eran símbolo de respeto y admiración…”
Estas líneas son el comienzo de una historia emocionante, de un año vivencias compartidas, el comienzo de una amistad. Estas líneas son el testimonio ilusionado de Rocío Gutierrez al entrar a formar parte de Amigos de los Mayores, al abrir un hueco de su vida para Felisa, una nueva amiga.
Estas líneas resumen de forma certera y conmovedora la filosofía de nuestra organización. Con “Semanario de una amistad“ Rocío ha dejado constancia de un viaje apasionante, el que emprendió junto a Felisa, en sus visitas semanales durante más de un año, sin prejuicios y con valentía.
“Llegué a las 7 a casa de Felisa, me recibió vamos, guapa de domingo, perfectamente arreglada, perfumada y con una gran sonrisa, las dos horas pasaron rápido, hubo momentos que tuve la complicación por saber como sobrellevar la conversación, sobre todo porque en algunos habla que desea morir…”
En “Semanario de una amistad” se suceden las visitas y la amistad se va fortaleciendo desde el descubrimiento mutuo, las meriendas, los regalos, las conversaciones, desde la sorpresa que proporciona el encontrar puentes con otra persona de, en apariencia, una generación y visión del mundo diferentes.
Tras un lapso de tiempo sin entradas en su blog, Rocío escribió la semana pasada “hoy toca despedirme, Felisa ha muerto, nos ha dejado un día medio soleado de un aún invierno muy lluvioso”. El martes se enterraba a Felisa en compañía de tan sólo unos pocos amigos fieles. “Semanario de una amistad” es un homenaje que Rocío le hace a Felisa repleto de belleza y honestidad. Desde Amigos de los Mayores pensamos que experiencias como estas justifican nuestro trabajo y te animamos a sumergirte en este viaje emocionante junto a Rocío y Felisa.
